Hasta los huevos

Hay días en los que no deberíamos levantarnos de la cama. No podrían pasarnos más cosas.

A mí últimamente me está ocurriendo tan frecuentemente que he llegado a preguntarme si me han echado mal de ojo. Sinceramente, nunca he creído en esas cosas pero, con tanta mala pata, me lo estoy llegando a plantear.

El otro día en una cena,  me contaban mis amigas de USA (ninguna americana por cierto), cómo en México en muy común pasar un huevo por la piel al que está gafado, o al bebé que llora, al que tiene algún mal. Yo me partía de la risa, pero me decían que era muy en serio, que es muy corriente. Yo les preguntaba de coña si el huevo tenía que ser grande o mediano, blanco o amarillo, ecológico o campero... Pues al parecer absorbe las malas energías. Dicen que si la clara sale cuajada o diferente es que sí había tipo mal de ojo.

Me parecía muy cómico imaginarme pasándome un huevo a mí misma. Sin embargo, os digo que a lo mejor un día decido a hacerlo...aunque seguro que, con mi buena suerte, se me rompe en mitad de la operación. Pero como quiero sacar lo positivo de todo, si se me rompe en la cabeza, lo usaré de mascarilla, que dicen que da mucho brillo y suavidad.

Y haciendo una búsqueda rápida por internet he podido ver diferentes mascarillas con huevo para hidratar, no sólo el cabello sino también la piel. Incluso sirve para las arrugas y, además, con ingredientes tan corrientes como la miel, el aguacate y el aceite de almendras o de oliva. Las he visto en una página de cosmética natural que se llama  www.innatia.com, que tiene multitud de recetas caseras interesantes.

La verdad es que los huevos a mí  me salvan la vida bastante a menudo, ya que es la cena más socorrida, al menos con mis hijos. Yo antes controlaba la cantidad de huevos por semana. Pero ya no.

Resulta que después de hablar con varios entrenadores que saben muchísimo de nutrición y de leer algunos artículos relacionados con el tema, vi que el huevo produce colesterol pero del bueno, muy necesario. Mis profes tomaban 3 ó 4 diarios. Eso sí, para controlar dieta sólo tomaban una yema, el resto claras. Si alguna mujer perfecta está interesada en el tema, que me mande un mail (elclubdelasmujereresperfectas@gmail.com) o un comentario al final de la página y le haré llegar los artículos que me he leído. Muy interesantes por cierto.
 

A mí me encantan de todas formas. Tortilla a la francesa, de patata con cebolla, de verduras, de queso, revuelto, frito, pasado por agua, escaldado, pochado, en las sopa castellana...pero, cuando tengo prisa, lo hago en el micro sin una gota de aceite..y está buenísimo. Eso sí, nada como dos huevos fritos con jamón serrano y patatas a lo pobre...mmmm

 

En www.huevo.org.es podéis encontrar todo lo que al huevo se refiere. Hay recetas, información sobre salud, juegos para niños...pero para mí lo más interesante es el apartado de marcado y etiquetado, algo que debemos mirar antes de comprar huevos.

Yo lo sé sólo desde hace un par de años por mis amigas que están muy puestas en todo lo sano. Hay que mirar el primer número que aparece en el huevo. Es muy importante, porque sin darnos cuenta estamos dando a nuestros hijos comida no tan sana como creemos. Lo ideal es comer el que tengo el 0(ecológicos) ó 1(camperos). Yo compro los camperos porque los ecológicos son exageradamente caros. Los baratos del súper son los del número 3, gallinas hacinadas que comen basura.  

Aquí tenéis el esquema, pero si queréis más información:  http://www.huevo.org.es/el_huevo_etiquetado_marcado.asp

Un párrafo que quiero que todas/os lean es éste:
Un huevo aporta cantidades significativas de una amplia gama de vitaminas (A, B2, B12, D, E, etc) y minerales (Fósforo, Selenio, Hierro, Yodo y Zinc) que contribuyen a cubrir gran parte de las ingestas diarias de nutrientes recomendadas para un adulto. La acción antioxidante de algunas vitaminas y oligoelementos del huevo ayuda a proteger a nuestro organismo de procesos degenerativos diversos (cáncer, diabetes, cataratas), así como de las enfermedades cardiovasculares.
 (fuente: http://www.institutohuevo.com/)
Por cierto, en esta página he descubierto que hay un Día Mundial del huevo: el segundo viernes de octubre. Y para celebrarlo han organizado un concurso de recetas. Si os apetece participar, la inscripciones hasta el 15 de julio y el premio es de 1.00 euritos. Os pongo el link http://www.institutohuevo.com/images/archivos/bases_concurso_cocina_con_huevos_2013.pdf
El Instituto Nacional del Huevo también organiza un concurso audiovisual, premiado con 1.000 euros y además un premio a la mejor investigación con10.000 euros.

 

Los huevos son también ideales para hacer talleres con los nanos. Estos son algunos ejemplos fáciles y divertidos:

Para la época de Pascua es muy divertido decorarlos y luego esconderlos para que los encuentren los nanos. Sobre todo si tenéis un nano que no puede tomar los huevos Kinder como yo. Eso sí, no os olvidéis de cocerlos antes por favor, como alguna que yo conozco.

 

Por último, no podemos olvidar la presencia del huevo en la fraseología española:

Quién fue primero, la gallina o el huevo

No hay gallina ponedora, que ponga un huevo cada hora.

La gallina que canta, pierde el huevo.

Hay que romper el huevo antes de hacer la tortilla.

Dale un huevo al codicioso, y te pedirla gallina.

El huevo de Cristobal Colón se lo comió Americo Vespucio.

No es por el huevo, sino por el fuero.

Bueno por un huevo y ruin por dos, aléjemelo Dios.

Cacarear y no poner huevo no es nada bueno.

Crece el huevo bien batido, como la mujer con el buen marido.

Todas estas frases célebres las he encontrado en www.sabidurias.com, donde no he podido encontrar mi favorita. Una que yo uso más de la cuenta y no es muy fina que digamos, y que no necesita ninguna aclaración (hablando de claras):

Estar hasta los huevos